El profeta colombiano de 26 años, que llevaba su Biblia para sus robos, actuaba en la zona norte del conurbano bonaerense. Abría los autos, tomaba objetos de valor y escapaba sin levantar sospechas. Para los sigilosos golpes utilizaba inhibidores de señal para desactivar las alarmas y los cierres centralizados de los vehículos.
Leía su Biblia en voz alta y fingía ser un profeta mientras observaba a los conductores y cuando éstos se encontraban lejos de sus autos, usaba inhibidores para abrir los coches y robar las pertenencias del interior.
El sospechoso fue detenido por agentes del Patrullaje de San Isidro y efectivos de la Policía Bonaerense cuando intentaba cometer un robo en la intersección de la avenida Santa Fe y Domingo Repetto, en la localidad de Martínez. Le secuestaron un inhibidor de señal, su Biblia, celulares y dinero en efectivo.