De cara al último trimestre del año, CAPYMA denunció que podría producirse un desabastecimiento de productos alimenticios de alta demanda.
La Cámara Argentina de la Pequeña y Mediana Industria de la Alimentación y Bebidas (CAPYMA) emitió un comunicado en el que advierte que se podría producir un desabastecimiento de productos alimenticios ante los aumentos indiscriminados en los precios de los insumos, la reducción en los plazos de pago y las dificultades para importar repuestos. Asimismo, exigen que sea uno de los ejes del debate presidencial.
En este sentido, Ornella Nacht, ingeniera en alimentos y presidenta de CAPYMA, explicó que “en lo que respecta a la cadena de suministro, los proveedores achicaron notablemente los plazos de pago, generando una inevitable incertidumbre entre todos los eslabones de la industria”.
“Hay una escasez muy pronunciada en la entrega de mercadería de alto consumo (aquella que se presenta en la mesa de los consumidores más de una vez por semana), como ser azúcar de primeras marcas, harinas, gaseosas, y otros productos presentados en envases de hojalata, en plástico o en cajas de madera”, agregó Nacht. Esto se debe, fundamentalmente, a la volatilidad que presenta el dólar, dado que, en su mayoría, ese tipo de packaging que escasea se produce con insumos importados.
Por otra parte, la cámara asegura que la industria se enfrenta a una triple problemática: en primer lugar, hay un 25% de los trabajadores activos (casi 6 millones) que no son demandados por el mercado, y si lo son, no están formados para enfrentar los nuevos desafíos técnicos que requieren los empleos modernos, y, por el otro, tenemos una fuerza de trabajo que califica y está formada, pero que es muy escasa frente a la demanda real de trabajo que viene teniendo el cambio tecnológico.